¡Fuera del palco!
"Lo de hoy me resulta verdaderamente difícil, al menos sin caer o en la desesperanza absoluta o en el improperio constante. Lo de don Julio Martínez ha sido de juzgado de guardia, indignante de todo punto. Tres terminó echando a los corrales y debieron ser los seis titulares, los seis de Peñajara, seis inválidos indecentes. Esto ya pasó en Valencia, donde el público, con mayor capacidad para tragar que en Madrid aguantó las treinta ¡30! Caídas del ganado lidiado el 13 de marzo, concediendo sendas orejas a Rubén Pinar. Diecisiete veces se caerían en Sevilla, ¡17!, con el corte de una oreja por Bolívar a un toro que sólo besó el suelo dos veces. Luego, entre esto, la corrida de la feria de Otoño madrileña, la de Colmenar Viejo del pasado año, y algunos más –como los que remendaron una de las corridas de la feria del aniversario- nos temíamos que la cosa no saliera bien. Como hoy se ha inaugurado el azulejo en honor de la corrida del pasado San Isidro, y como el yeso aun estará fresquito, a ver si aprovechamos para hacer un hueco…
La incompetente actuación de don Julio a punto ha estado de provocar un grave altercado de orden público. Los gritos de “¡Fuera del palco!”, “¡Manos arriba, esto es un atraco!”, “¡Puuuuuum, petardo!” y “¡Ladrones!” se han coreado en diferentes momentos del festejo, entre otros dirigidos bien a la presidencia, a la empresa o a la Comunidad de Madrid, responsable en la sombra de avalar la “innegable categoría” de los carteles isidriles. Pero lo de don Julio raya la desvergüenza más absoluta: ha cambiado toros en el caballo, todavía en el peto, para disminuir la presión de las protestas cuando a la salida se cayera la birria de turno. Incluso, en el sexto, el sobrero de Pío Tabernero, ha sacado el pañuelo cuando éste entraba al caballo, prácticamente sin haber llegado aun al peto. ¡Qué vergüenza! ¡Qué indignidad! ¿Qué hace este individuo en el palco de la primera plaza del mundo? ¿Qué hace la autoridad de la Comunidad de Madrid permitiendo que asiente sus posaderas sobre algo tan inmaculado y trascendente como el palco de Las Ventas? ¡No pararemos de pedir por activa y por pasiva la destitución fulminante de este ignorante en materia taurómaca, de este sujeto incapaz de presidir como se debe la plaza más importante del orbe taurino! Porque los tres devueltos no le excusan de responsabilidades. Si rápido fue en echar el sexto, ¿por qué no hizo otro tanto con los otros inválidos lidiados? ¿En qué se diferenciaban aquellos, de éste que echó con tanta prontitud? ¡Qué falta más desvergonzada de criterio! ¡Fuera del palco!..."
2 comentarios:
El ganadero de la genética y el cuento, D. José Rufino, mandó a Madrid los seis toros con parasitación hepática. Según se ha visto en los analisis realizados en el laboratorio de toxicología veterinaria de la Comunidad de Madrid.
En declaraciones posteriores a la corrida, el ganadero,no encuentra explicación a lo sucedido. Promete hacer analisis a sus toros.
Ya no los necesita, a curarle el mal y que no se repita la bochornosa tarde de ayer.
Eso pasa por estar pendiente del ADN y no de la sanidad de sus toros. Como hacen los buenos ganaderos.
Saludos
¿Que no lo sabia el ganadero, el mayoral y hasta los vaqueros?, yo no me lo creo.
Estan en contacto diario con los toros y no creo que la enfermedad o parasito que tenian, pues quizas tenian mas de una enfermedad esta de manifieste de repente cuando salen al ruedo.
Lo sabian y vamos la empresa atraves de su veedor tambien debia de saberlo, pero claro la terna era de las que torean lo que les echen, Miuras, Dolores, Cuadri, Barcial, Prieto de la Cal etc, o sea que se enfrentan a lo que les pone el empresaraio, son los unicos no culpables.
El instituto de toxicologia todavia esta pendiente de determinar si son aptos para el consumo humano, de momento la carne esta confiscada, aqui los sabia todo el mundo, ¿cuanto pagaria la empresa por unos toros destinados a ser incinerados? el pecio de la carne, ahorro al empresario y gano el ganadero pues de ingresar 0 euros si hubieran ido al crematorio a cobrar aunque fuera la carne pues algo es algo.
Y los veterinarios de la plaza que reconocen, y el presidente que actua a capricho aparente de la empresa.
Aquello fue un presunto fraude que debe ser investigado a fondo y uino de los investigados debe ser D. Julio Martinez Moreno.
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