El Puerto de Santa María se queda, de momento, sin poder celebrar festejos taurinos. El motivo, según un informe del Arquitecto Municipal, es debido "al gran riesgo de peligro inminente, que actualmente representan los focos existentes en la cubierta de la Plaza de Toros por posibles desprendimientos de sus soportes y caída sobre los tendidos, que hace que no se permita la celebración de ningún festejo taurino y no taurino en el coso portuense, hasta tanto en cuanto no se proceda a la revisión, a la sustitución en su caso, y al afianzamiento de los focos y se certifique por algún técnico competente la seguridad de los mismos".
Por el momento en Málaga no parece haber riesgo de desprendimiento de los focos de su plaza, aunque es posible que en las corridas nocturnas de agosto, con la lamentable iluminación artificial de la Malagueta, pueda salir más de uno con dolor de cabeza por forzar la vista, especialmente si se lidian toros del tamaño de los de Gerardo Ortega de hace dos años. Pero ya se sabe que de noche todos los gatos son pardos y, pudiera ser, que los gatos puedan parecer toros... Deseamos que el ganado que se lidie en la próxima feria pueda verse sin necesidad de prismáticos ni telescopios.
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