Estocada al maestro Puyana y a la Banda de Música de Miraflores-Gibraljaire
Publicado en la sección de cartas al director en el diario La Opinión de Málaga
Sucedió en Miraflores de Málaga: un buen día, por sorpresa, al maestro Puyana Guerrero, notable instrumentista, catedrático de música; así se ofrece en su biografía d. José María, y entre otras veleidades decir de él debo: que es el director de la Banda de Música de Jóvenes de Miraflores Gibraljaire, topónimo el penúltimo en donde se centran los hechos, o sea, en Málaga.
Vayamos pues por delante al desaguisado: la banda fundada en 1975 por d. Perfecto Artola ¡a la calle!, ¡y con orden, que son ustedes muchos, 160! No más banda en la plaza de toros, la crisis, el IPC, la inflación, los chollos, las influencias, los malos negocios, arguyen como catalizador del problema en un bando gestado en los intereses de los empresarios del coso de Miraflores, La Malagueta, como se le conoce. ¡Ole y ole! Así que ¡a la calle! Y no por la puerta grande, como tantos pudieron ver sobre hombros fornidos saborear la muerte del bicho. Y todo porque estos se juegan la vida, valientemente, como si solo entendieran de la vida su absurdo, y la muerte suponga una extraña y rara forma de interpretar el error, no así las cornadas que bien necróticas dejan las cicatrices bajo sus ajustados calzones. ¿Pero, a la calle quién?, los de siempre, a los pobres porque ser creador, de música claro, y demostrar lo que vales con años de solfeo e instrumento, eso no tiene ningún mérito para algunos, los ignorantes, y obliga por ello a tomar medidas: primero el arte, musical claro, y luego ya veremos. Eso sí, cuidado, los toros que no falten, los abonos tampoco y si las subvenciones que no flojean y si hay que sacar lastre: ¡Músicos de Miraflores Gibraljaire, d. José María, toca retirada!
¿Lo harán tras informar el “Ecijano”, veedor de La Malagueta por aquello de que él allí vigila, allí controla y acullá registra?, y como vaya de melómano, mala comida maestro Puyana, la hipoacusia del inspector puede que le convierte en informador acusador y ya sabe, a pesar del honor de su segundo apellido, el de su madre: enfile instrumentos en ristre hacia los exteriores de la plaza. Evidentemente en las instituciones, los cortinones y los macro cuadros de siglos atrás se reconvierten en lugares de expresiva sonoridad y cuánto dijo el “Ecijano” se recoge en estéreo, va a misa, y se ordena al escribano que configure un bando para poner en los postes de la luz, en el tablón de anuncios de la entrada y en las carnicerías con clientela así como en las peluquerías de corte tradicional, tipo Amadeo de Saboya. Y un epitafio bien claro, como este: “La banda de M.G. no tocará para diestros ni para siniestros desde ya tras los recortes presupuestarios que nuestras señorías asienten” Nota: los toreros, de momento, seguirán copando las revistas del corazón y engordando sus pobres cuentas corrientes. Pendón, perdón, pues quise decir el pte. de la excma. Diputación Provincial de Málaga, d. Salvador Pendón, no hizo honor a su nombre y salvar a estos genios de la banda malacitana de pura raza, como la casta de ciertos toros, sería una buena precampaña.
D. Javier Conde y el sr. Rivera como cuando se enfrentan al animal, no sienten como una banda que les adornan sus tardes de faena han sido víctimas de una mala faena en la que ellos sin trapío tal vez tengan participación en el meollo.
D. Fernando Puche, que le roban la gracia y el aviso con lo que sus acciones quedarán pobres de melodía, su corazón arrítmico y la alegría mermada. Usted verá. Y sr. alcalde simbiotize con la excma. Diputación y, por favor, que los músicos con su director y maestro, Puyana, son malacitanos de bien, y piensen, aunque sólo sea por esta vez, que la plaza o coso no tiene sentido sin ellos, es como si faltaran los toros en la arena, o el capote al diestro, o el caballo al picador, o viceversa...
A los que nombré, perdón por conocerme, no era mi intención, a los que no nombré, por omisión, siéntense aludidos. No tengo más tiempo que el poder decirles que también puede mi conciencia adornar de flores los gestos nobles y asépticos.
Maestro Puyana, Banda de Música de Miraflores-Gibraljaire, ustedes sí saben salir por la puerta grande.
Enrique Melio Rey
Málaga
1 comentario:
Sabias, a la vez que bien argumentadas,las palabras de d. Enrique.
No hay peor ciego que aquél que no quiere ver. Don Puche, don Pendón y su cortijera Diputación deberían ver, por una vez en la vida, que hay cosas con las que no se puede jugar, cosas que pese a su apego al negocio, al amiguismo y al "chollo", son incuestionables por su arraigo y por su saber hacer sin igual. Don José María Puyana y su banda lo han demostrado siempre.
Ojala se imponga la lógica y hagan algo en condiciones.
Germinal
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