lunes, 27 de abril de 2009

Esto pasa de castaño a oscuro

Morante con la oreja. Foto Matito/Sevillataurina.com

No voy a discutir la oreja concedida a Morante, tampoco su disposición y entrega como raras veces he presenciado en él, ni su toreo con la capa especialmente dos verónicas mecidas, una chicuelina muy ajustada y dos medias extraordinarias. El capote de Morante es un pincel para dibujar carteles de toros. Pero su faena con la muleta en el quinto toro fue justita, con entrega y con valor, sin duda, pero abusando del toreo al hilo y del pico de la muleta. Pero fue el de La Puebla el que salvó los muebles a una empresa que compró y a una autoridad que aprobó, tras rechazar a otros tantos ejemplares, una impresentable corrida para una plaza de la categoría de la Maestranza. Y el público sigue tragando. Lo de Finito a nadie puede extrañar. Este torero sólo está para tomarle el pelo a los turistas por las plazas de los pueblos de la Costa del Sol. Al menos no le echaron ningún toro al corral como ha ocurrido en Málaga en dos años consecutivos. El "picassiano" Castella sigue sin remontar y anda muy vulgar.

ESTO PASA DE CASTAÑO A OSCURO

Por Pacopi

Plaza de Toros de La Real Maestranza. 26 de Abril del  2009

Seis mierdecillasde Jandilla, chicos, mansos, tontos. Mejores  4º y 5º, sobre todo el 4º

Finito:  Silencio. Algunos Pitos. Despedido con pitos

Morante: Saludos desde el tercio y oreja.

Castellá. Silencio. Silencio.

No alcanzo a comprender como la afición de Sevilla no quema la plaza, no organiza un motín de sonadas consecuencias. Salen gatos un día sí y otro también y la sufrida afición tan tranquila, engordándole la talega a Canorea. No hay derecho a que salga por chiqueros lo que está saliendo. Dicen que hoy le han rechazado  seis “toros” a Jandilla por faltos de trapío, y a la vista de lo que ha salido por chiqueros, los rechazados sólo se debían ver con el microscopio electrónico.

Finito  hace tiempo que perdió la vergüenza torera y no la encuentra. Pase que en el primero no hiciera nada porque hacerle algo a ese animal es como hacérselo a los toros de guisando. Un animal que quedó inválido y  se aculó en tablas. Dos pinchazos y cinco descabellos. No tiene excusa en el cuarto, el mejor de la corrida, que aunque se dolió en banderillas y fue muy protestado durante el tercio de varas, embistió como un carretón a la muleta. Mas Finito no estaba por la labor, no le cogió la distancia, le dio pases trompicados y mantazos ante la indiferencia del público. Pinchazo, media desprendida y atravesada. Silencio con algún pito. Fue despedido con pitos. Lo de este hombre está frontero a la estafa. Debe tener alguien muy poderoso para conseguir que lo pongan en las ferias importantes un año y otro sin dar un pase. Imagino, no obstante, que el  doctor Comino dirá que estuvo como los ángeles y que toreó como no lo ha hecho otro igual, pero esto sólo es comprensible en la mente del doctor Comino y en las de sus “viudas”, que también las tiene, que deben ser privilegiadas  para apreciar estos matices d0nde el resto de los mortales solo vemos vulgaridad.

Otro caso patológico es el de Morante. En el  segundo de la tarde dio mantazos que se magnificaron hasta límites insospechados, metiendo pico sin cruzar, arqueando el cuerpo, para terminar dando medios pases. Media contraria huyendo. Saludos desde el tercio. Dignos de oír eran los comentarios que hacía el Fenicio durante la lidia del quinto. Seguro que ese hombre estaba sobrecogido ante tanto “arte, se le jaleaban hasta los desarmes. De acuerdo que dio lances de cierta enjundia estética pero estos fueron pocos y sin continuidad. Concedo que estuvo más valiente de lo común, que dio dos naturales buenos, pero de ahí a calificar el suceso de gran faena va un abismo. Concedo y reconozco que la oreja cortada, tras una media desprendida, fue justa. Pero no me negaran, “viudas de Tunante” que empleó el pico de la muleta más de lo que sería prudente desear.

Hoy Castella  no iba vestido de grajo, pero si conserva su atiplada voz. El tercer animalito de la tarde se le murió de un “telele” o de un "yuyu" como decía el propio torero sin que éste entrara a matar. Descanse en paz. Tal vez se asustó de ver al gabacho echárselo para las afueras, aunque eso sí, le dio distancias (al curita licencioso, amigo de Tomás, le costará trabajo creérselo). Algo mejor estuvo en el que cerraba plaza, iniciando la faena por estatuarios y terminado la serie con un recorte muy torero con la izquierda, luego toreó para las afueras, casi igual que Morante, pero con menos cuento. El animalito se va a las tablas y Castella, lejos de plantarle cara en dicho terreno y darle los pases –pocos- que le quedaban allí,  se lo intenta llevar a los medios y aquí se acabó todo. Estocada trasera. Silencio.

Hay que tomar medidas para que la autoridad, los ganaderos, las empresas y los toreros nos dejen de tomar el pelo aprobando estos auténticos saldos de gatos enfermos. Acudamos en masa a pedirle consejo a la peña recreativa “El Rabo alegre” seguro que nos asesoran bien y nos recomiendan organizar un gran memorándum andaluz o dos pequeños.

Un saludo.

El rincón de Malagueto

6 SINVERGÜENZAS 6
 
Ganadero, empresario, toreros y el fenicio. Después de los visto y escuchado esta tarde, es lo más suave que se me ocurre decir. Llevar repetidamente los Jandillas a la Maestranza es un insulto a los que pagan. Contratar a Finito es para hacer caja con los cordobeses que, por casualidad, siempre torea en fin de semana en  Sevilla. Igual que ocurrirá con el Fandi. Si Finito no sabe sacarle partido a su segundo, mejor que se retire y deje su puesto a uno que se embraguete por lo menos.
 
Lo de Morante es de estudio sociológico porque antes de dar  un mantazo ya le están jaleando, incluso quienes deben saber del tema. Así, en una chicuelina enganchada y no terminada, suelta un bieeeeen el tío del bigote y la cartera llena. Son ya siete toros en Sevilla y una orejita del paisanaje. Si es tan buen torero, que se despatarre en la muleta y no abuse del pico y de torear al hilo. Este fumador de puros en el callejón se sostiene por los Morantistas que se conforman con verle unas verónicas y tres adornos.
 
Castella tan vulgar como nos viene acostumbrando últimamente. No sabe torear bien y tampoco sabe los terrenos que debe pisar. Pero si nadie se lo recrimina, pues el tío a continuar con su tauromaquia que es la de seguir dando mantazos.

1 comentario:

El Coronel dijo...

Bueno Morante, es lo que es, pero mejor que el "medallista" de la UTE de Malaga.
Salud