La feria que viene

Decir de entrada que, en conjunto, los carteles anunciados son notablemente mejores a los de la pasada feria. Sin embargo, y bajo la visión del aficionado, hay una clara descompensación en la cartelería, pudiendo hablarse de dos partes en el ferial. La primera abarca desde el viernes 14 al jueves 20 de agosto. Para comenzar, interesante la novillada con el malagueño Jiménez Fortes, el murciano Pablo Belando, apoderado por Jorge Conde que gustó el pasado año, y por imperativo legal el ganador del pasado certamen de Escuelas Taurinas, el portugués Gomes que nos dijo más bien poco. Los novillos de Macandro dieron buen juego en una novillada en Sevilla. Algunos piensan que en lugar del murciano podía haberse optado por el consabido "mérito" del paisanaje: Ismael Cuevas o Cabello, aunque ambos tuvieron ya su oportunidad el pasado año. De todas formas, insisto, interesante cartel.

De los mejores el cartel del día 15 con El Cid, Perera y Luque, aunque cada uno llega en momentos diferentes, especialmente el Cid en horas muy bajas. Oportunidad para que este buen torero vuelva a ser quien fue y, sobre todo, con la ilusión de que el de Salteras vuelva a dar una buena tarde en la Malagueta, que ya va siendo hora. Perera a imponer mando y Luque viene pidiendo guerra, aunque todavía le faltan varios hervores. La ganadería de Los Recitales, otrora hizo un buen papel en la Malagueta y, aunque mal presentados, dieron excelente juego en Madrid. La de rejones, según los entendidos, también conforma un buen cartel. Lo mismo puede decirse del festejo del día 17, otro de los carteles fuertes con Castella, Manzanares y Cayetano. Dudas y muchas para la ganadería del Capea, que en Málaga ha lidiado buenos ejemplares, pero en la pasada feria trajo una corrida que manseó en el caballo con algún ejemplar anovillado y falto de cara, y un primero inválido que fue devuelto. Por cierto, su hijo Periquito no viene este año a pesar del despojo cortado en Madrid. Se agradece. Como también las ausencias del señorito Abellán y de Finito.

La "corrida del arte" del día 18 puede ser considerada de alto riesgo o, lo que es lo mismo, puede acabar en escándalo mayúsculo o en corrida para la historia, de esas que disfrutan hasta los que no estuvieron. Para que suceda lo último seguro que al público del "Mundo feliz" y del "no se pué aguantar" le bastará con poco: un ramillete de buenas verónicas de Morante, unos pintureros adornos de Julito, y que Conde baile poco, aunque la verdad es que las "mentes perversas" piensan que en realidad esta corrida es un mano a mano entre Aparicio y el de la Puebla. La ganadería La Campana, antes Sánchez Benito, es propiedad del apoderado de Morante y yerno de Antonio Barrera. Ya se comprende la presencia de Barrera en la feria. La del 19 es justificable de cara a la empresa, pero no para el aficionado. Pero el Fandi trae muchos seguidores a la plaza, entre ellos a la famosa "Gorda" que anda desesperada a la búsqueda de Pacopi para darle un "cariñoso" abrazo. Y será ocasión para que el modelo, empresario, picassiano y medalla de oro nos vuelva a deleitar con su "bello arte". Y el Cordobés es muy simpático. La verdad es que el granadino y "Manolillo El Cordobés" no engañan a nadie. Y como ha dicho Puche públicamente hay que contentar a la "masa" que viene a "divertirse" y, ganar dinero don Fernando, que es su principal obligación como empresario, faltaría más. Ya nos encargaremos de alabar o censurar su gestión.

No cabe duda que la presencia de Tomás el 20, día de su cumpleaños, constituye el cartel de mayor factura para la empresa. El de Galapagar, del que soy creyente, a pesar de su ausencia en plazas en las que debería estar, se encuentra en un gran momento y parece haber dejado atrás su etapa de enganchones y atropellos. El Fundi que anda el hombre de percance en percance es un torero del gusto de la afición, aunque preferiblemente frente a otro tipo de ganado. La variación con respecto a otros carteles del "mesías" es la presencia de Luis Bolívar que muchos no ven claro, pero al que tampoco vamos a poner muchos peros para que no se nos enfade nuestro buen amigo Tomás de Colombia. La ganadería del Pilar ofreció varios ejemplares bravos, encastados y de calidad en la pasada feria, uno premiado aunque con cierta polémica y de escasa presentación; también viene con el aval del gran encierro que envió a Sevilla y de algunos buenos ejemplares lidiados en Madrid.

Hasta aquí una programación de festejos para todos los gustos y digna de una plaza de primera categoría. Pero a partir del día 21 la cosa da un cambio copernicano. Para el fin de semana más fuerte de la feria se nos propina doble jornada de tarde y noche, de sudor pegado en ropas y cuerpos desde la tarde hasta la madrugada, de bocatas y recomendable almohada por si el aburrimiento y Morfeo hacen presencia en la plaza como hace dos años, de antiinflamatorios y ungüentos para aliviar espaldas y posaderas tras aguantar tantas horas en las piedras de los tendidos, de forzar la vista por la deficiente e impropia iluminación artificial de La Malagueta, de jornada maratoniana para los medios de comunicación, de apreturas en los restaurantes cercanos para el obligado refrigerio de entreacto, de fastidio para el personal que desee acudir de noche al Real de la Feria, de regalo de entradas a familiares y amigos... Todo un despropósito con nocturnidad, alevosía, por partida doble y seguida. Los toros a la luz del día, con sol y moscas como decía el Guerra.

Resulta más que evidente que las nocturnas están metidas con calzador y, a más de uno, nos hace pensar que en algo han tenido que ver algunas "advertencias" realizadas sobre cierta cláusula del pliego de adjudicación del coso del Paseo de Reding. Novedad en esta empresa anunciar una corrida mixta con un rejoneador y dos matadores, a la que Juan Ortega, acertadamente, ha denominado "fórmula magistral". Y en dicha fórmula se han empleado dos matadores de toros y un rejoneador. Cosa bien distinta, y estimo que de total ajuste al pliego, hubiera sido un festejo con un rejoneador y tres matadores, a los que en nuestra juventud hemos asistido con frecuencia en la Malagueta. Pero tampoco quiero cargar más las tintas sobre el asunto, entre otras razones, para evitar que don Salvador se nos enfade más, se nos pueda congestionar y tenga que volver, sorprendentemente, a erigirse en paladín de la defensa de la legalidad de la empresa. Atentos, pues, ya que dicha fórmula mágica puede repetirse en próximos festejos; verbigracia en la próxima corrida picassiana o de Resurrección, si las futuras obras a acometer en la Malagueta permiten el que puedan celebrarse.

Que se nos diga que la corrida de Samuel Flores es la "torista" es de chiste. Este ganadero lleva más de un lustro sin lidiar una corrida decente. La de Madrid fue una moruchada, sólo amplios cajones con cuernos, y recordar que sus toros han sido rechazados por enfermos, la última vez en Albacete. Ante ellos el llamado maestro Ponce que dicen viene de despedida y Matías Tejela que poco o nada ha dicho en Málaga y últimamente anda petardeando y con gran aflicción. Para continuar, ese mismo día y con nocturnidad, se anuncia de nuevo a Mari Paz Vega con el hierro de Jaralta que el pasado año ofreció un encierro con altibajos en cuanto a presentación y comportamiento. Completan la terna Antonio Barrera que ya sabemos por qué está en esta feria y Joselito Ortega que viene con el único crédito del paisanaje y la "calidad contrastada" de haber toreado una sola corrida hace dos años en Málaga. ¿Cuántos de los que dicen que por ser de Málaga y torear poco hay que ponerlo, realmente están pensando lo contrario? Flaco favor se le hace al malagueño. Eso sí, barato le sale a la empresa. No obstante vaya mi respeto hacia él y el deseo de que esa sea su noche. Pese a todo, me quedaré en la plaza para ver a Mari Paz. Sólo verla entrando a matar lo merece. Ya saben que es una de mis debilidades. Sin embargo, barrunto que será festejo donde se regalarán muchas entradas por parte de los abonados.

De nuevo doble jornada al día siguiente. Lo de Juan Pedro, descaste total, petardo plaza tras plaza, en Sevilla una vez más, aún con algún medio toro en Madrid. Por la tarde con los del descastador mayor del Reino, de nuevo el académico Ponce, maestro del adorno, del toreo centrífugo y rey del aviso y del indulto. Decía que el Fandi y el Cordobés no engañan a nadie, pero el de Chivas lo viene haciendo desde tiempo inmemorial. Unicamente me interesa cuando delante tiene un toro encastado y con complicaciones, y no es de esperar que sus oponentes le generen dificultades, sino todo lo contrario. Andarán contentos los de siempre que luego cantarán su tauromaquia como espejo en el que mirarse los alumnos de las escuelas taurinas. Si además indulta a un semoviente de Juan Pedro, la tarde será cumbre. Atento don Ildefonso, por si le toca presidir. Puede usted hacer historia... Manzanares y Salvador Vega, al que todavía algunos siguen esperando, completan la terna. Por la noche seguimos con encaste Domecq con un más que interesante mano a mano entre dos toreros de mucho valor y abundante encimismo como son Castella y Perera.

Finaliza la feria con la despedida de Esplá en la Malagueta. Bienvenido sea aunque en esta plaza no se le haya visto ni por asomo. Lo de Madrid resulta prácticamente imposible que se repita, pero espero que su actuación sea la que todos deseamos, un rotundo éxito. Ese día tendré en mi pensamiento a doña Nieves, esposa del gran José María Vallejo, gran aficionada de las nuestras y acérrima defensora del alicantino. Se me va a hacer difícil y triste estar en el tendido si tener a mi lado a mi amigo Paco Garrido y al volver y elevar la mirada hacia el palco del primer piso del 6 no ver a doña Nieves en su localidad. Acompañan a Esplá, Javier Conde y Cayetano que repiten. Dicen que Conde lo hace por la ausencia del Juli por motivo de sus elevadas exigencias económicas. Es posible, pero también lo es que hay más toreros que podrían haber suplido tal ausencia, pero ello encarecería la factura. De Conde se espera lo peor, pero también puede ocurrir que le de por torear como el año pasado en uno de sus toros. Por cierto, los gatos del parque andan contentos por la ausencia de don Julián. De todos modos, por lo que pueda pasar, recomiendo que durante la feria no paseen sus animales de compañía por las inmediaciones de los corrales de la Malagueta.

En resumen buenos carteles de toreros y rejoneadores, con casi todos los que son, pero sobrando algunos de los que están. Cosa diferente es el ganado que se anuncia que, salvo un par de ganaderías, son de segunda fila y con absoluto predominio del encaste Domecq. Si bien lo de este encaste es como el colesterol, que lo hay del bueno y del malo, desgraciadamente predomina el más dañino. Pero profetizar sobre toros es una solemne tontería y hasta que no se vean en el ruedo habrá que esperar. Lo que si debe exigirse a la empresa es que salga el toro para una plaza de primera categoría. Porque el “toro de Málaga” es la gran mentira con la que los taurinos nos quieren colocar al toro terciado, gatuno, despitorrado y de saldo. Será responsabilidad final de los equipos presidenciales velar porque el toro ya no sea la asignatura pendiente de esta plaza. Además de elevar el nivel de exigencia en el palco, para hacer comprender a más de un coleta que a Málaga no se puede venir con actitudes de desidia, a pasar la tarde o la noche, comer pescaito y pasar por caja, con el pensamiento puesto en Bilbao.

Bienvenida de nuevo a su plaza, de la que nunca debió irse, a la Banda de Miraflores-Gibraljaire. Tan solo una recomendación o ruego a sus componentes: mantengan sus teléfonos apagados durante la celebración de los festejos.

Que Dios reparta suerte para todos.