La Unión de Abonados de Sevilla sí defiende a sus socios

Plaza de la Real Maestranza de Sevilla

Nota de la Unión Taurina de Abonados y Aficionados de Sevilla

En la mañana de hoy el Pte. de la Unión Taurina de Abonados y Aficionados de Sevilla, Diego Martínez y el vocal Miguel Perez, han sido recibidos por el Excmo. Sr. D. Alfonso Guajardo-Fajardo y Alarcón, Teniente de Hermano Mayor de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, a quien han mostrado la honda preocupación  existente entre los aficionados por el bajo nivel de calidad  de los festejos de la reciente feria de abril y descenso de prestigio de la plaza de toros de Sevilla. A este respecto le fue entregado al máximo responsable de la Real Corporación el comunicado emitido por la UTAA Sevilla el pasado 1 de mayo como análisis de la feria y un documento que se adjunta en el cual se vierten las consideraciones que a los aficionados preocupan en relación a nuestro coso de Sevilla.

UNION TAURINA DE ABONADOS Y AFICIONADOS DE SEVILLA

La U.T.A.A. Sevilla considera que la plaza de toros de la Real Maestranza es una referencia y un símbolo en todo el ámbito taurino  que obliga por igual a cuantos amamos el arte del buen toreo a conservar su buen nombre, a potenciar al máximo los espectáculos que presenciamos y a prestigiar el desarrollo de una fiesta que Sevilla proyecta a todo el planeta de los toros.

En las últimas temporadas apreciamos que la empresa Pagés, arrendataria  y responsable de la organización de los festejos, gestiona el coso con resultados claramente descendentes en lo negativo y preocupantes en relación a mantener el prestigio de la plaza. Son apreciaciones que los medios de información publican en los balances de la temporada y demandan al mismo tiempo soluciones que no se vislumbran en los responsables de la mercantil gestora.

Opinamos que en un círculo y entramado tan complejo y de tantos intereses como el taurino, la plaza de Sevilla está obligada a ofrecer carteles de toros y toreros donde se anuncien siempre los mejores, sin que esto sea óbice para escatimar medios, ni que las pretensiones de ganaderos y toreros sean obstáculo para que una empresa con capacidad de negociación y flexibilidad suficiente rehuya a este reto y se pliegue al contrato fácil, a sabiendas que el prestigio de la plaza ganado por sus antecesores les asegura los llenos que les permiten ganancias seguras.

No comprendemos la persistencia en mantener en la cartelería hierros y toreros que cuentan en las últimas temporadas sus apariciones en Sevilla como sonoros fracasos: el encaste Domecq en algunos de sus variados hierros o profesionales como Finito, Conde, Rivera, Cordobés etc. Tampoco compartimos actitudes discriminatorias por parte de la empresa con determinados medios de comunicación sevillanos como Sevilla TV o Sevilla Taurina para que puedan ofrecer información libre e independiente.

Es preocupante la corriente que aumenta cada temporada de un público en la Maestranza, que llena los tendidos, pero que cada año apreciamos más ocasional y menos permanente. Supone esta circunstancia que el aficionado amante del buen toreo, exigente en las formas maestrantes y escrupuloso con la pureza y el arte de torear, deserta de los tendidos para dar paso a una clientela superficial que poco o nada contribuye a mantener el prestigio de la plaza. En la reciente feria de abril tenemos algún ejemplo reseñado ampliamente en la prensa especializada.

La Maestranza tiene que ser la obra que todo el espectro taurino copie y admire. Para ello es necesario que sus regidores obren con la suficiente capacidad, altura de miras y flexibilidad empresarial que permita una gestión cuyo beneficio a los toreros sea la gloria y los contratos, al aficionado la satisfacción de admirar el arte más singular y puro y  ellos mismos asegurarse los beneficios económicos que genere el trabajo bien hecho.

Antes de finalizar la feria de abril 2009 y haciéndonos eco de la gran preocupación que no solo en Sevilla, sino en el resto de España había suscitado el pobre resultado de los festejos, emitimos un comunicado que reflejaba fielmente las ideas de un amplio sector de aficionados, el cual por la contundencia de lo manifestado en el mismo tuvo en su día mucha repercusión en los medios de información especializados.

Transcurridos varias semanas desde entonces podemos asegurar que las adhesiones al comunicado aumentaron de forma sorprendente y tanto medios de información como aficionados resaltaban que ya era hora que la afición de Sevilla despertara y se atreviera a manifestar alto y claro lo que antes opinaba a nivel de tertulia o individualmente. En este periodo de tiempo también se produce otro acontecimiento muy significativo que afecta a la plaza de toros de Sevilla, como es la dimisión irrevocable del Presidente con más antigüedad, seriedad y prestigio. Esta decisión la entendemos como otra manifestación de que las cosas no funcionan en los sectores que intervienen en la fiesta y por eso reiteramos nuestra petición de que la Delegada del Gobierno como responsable administrativa y la Real Maestranza de Caballería propietaria de la plaza asuman estas consideraciones de los aficionados y convoquen a las partes afectadas para tras un análisis sereno y meditado se reconduzca la situación y la plaza de Sevilla sea referencia máxima de prestigio y seriedad en la tauromaquia.  

La UTAA Sevilla manifiesta su deseo de continuar en esta línea de opinar y denunciar lo que consideramos no nos gusta a los aficionados en nuestra fiesta y para ello contamos con dos poderosos argumentos que son el pasar por taquilla y la palabra razonada y meditada, razones que nos permiten coincidir con las Uniones Taurinas de Aficionados integradas en la Unión Nacional Taurina como son los integrantes de las asociaciones de Castellón, Zaragoza, Teruel, Madrid, Burgos, Valencia, Algeciras, Málaga y Granada.

 Así pensamos que ante el deterioro en la crianza y selección del toro; ante los desmanes de muchos que integran el entramado taurino; ante la manipulación de algunos medios de comunicación y ante unos responsables políticos que prefieren una fiesta populista alejada de su aspecto cultural y singular, estamos los aficionados que demandamos una fiesta proyectada hacía el arte mas real que conjugue la emoción y el riesgo y por ello queremos hacer llegar a esta Real Corporación nuestra preocupación para que como soporte esencial de la fiesta en Sevilla sea conocedor del sentir de aficionados independientes sin vinculación alguna con los diversos intereses taurinos.