viernes, 17 de abril de 2009

Vuelven los gatos al parque


Paseando ayer por el parque de Málaga observé la presencia de algunos gatos en tranquilo esparcimiento. Desde el Sábado de Gloria habían desaparecido de dicho entorno. Tal circunstancia no entendía a comprender hasta que pude observar los felinos ejemplares que saltaron al ruedo de la Malagueta el Domingo de Resurrección.

Hoy sabemos, por lo que se cuenta por las esquinas de la ciudad y por lo manifestado en una emisora de radio local popular, que los doce toros reconocidos para el festejo de Resurrección no habían pasado el fielato veterinario y que fue la propia presidenta del festejo, haciendo uso de la potestad que para ello le otorga el Reglamento Andaluz, quien repescó a los seis gatunos ejemplares para componer la corrida. La presidenta tuvo una brillante actuación en el palco que hubiese rayado la perfección si hubiese devuelto de inmediato al primer ejemplar manifiestamente inválido y al sobrero con evidentes signos de descoordinación. Sin embargo, su actuación en los corrales es manifiestamente mejorable. No es admisible rescatar tal número de ejemplares indignos ya para un coso de segunda categoría y en una corrida de tal importancia en la que hubo mucho público foráneo, muchos de los cuales salieron estupefactos y guaseando de que la Malagueta sea una plaza de primera categoría. Dicen que lo del ganado en Málaga ya no es una asignatura pendiente, sino una materia fracasada, pero tal situación no es irreversible si un día hubiese lo que hay que tener para suspender una corrida por falta de toros. Entonces la empresa se lo pensaría a la hora de elegir toros de lidia en el campo o gatos de parque.

Los que callan, y no quiero pensar que a lo mejor otorgan, son los veterinarios que siguen siendo los convidados de piedra en los corrales. A ver cuando se plantan los profesionales veterinarios, por su dignidad y por la de su profesión. Sería lógico y deseable que se manifestarán al respecto tanto el Ilustre Colegio de Veterinarios de Málaga como La Unión de Profesionales Veterinarios de Plazas de Toros de Andalucía (UVET), que lleva cierto tiempo enmudecida.

Mientras tanto, cuiden de pasear a sus perros, gatos o cualquier otro animal de compañía por los adelaños de la Malagueta en días de corridas toros. Ni tampoco a algunos amigos vaya a ser que los cojan para cabestros.

4 comentarios:

SF dijo...

Compañero Pepe, disculpe que discrepe con usted, pero creo que no se puede decir que la Señora Romero tuvo una brillante actuación en el palco, rozando la perfección si hubiese devuelto antes al primero de la tarde y luego al sobrero.
Bajo mi punto de vista, ese gesto, ya echa por alto la actuación de un presidente en el palco. Además, más a mi favor todavía, cuando afirmas que fue la propia Ana Maria Romero quien tras rechazar los 12 toros, escogió a 6 para que que se pudiese celebrar la corrida.

Perdone que no esté de acuerdo con usted, pero bajo mi punto de vista, la Presidenta habría estado perfecta si tras reconocer los 12 toros y ver que ninguno era apto para Málaga, hubiese suspendido la corrida. Ese si hubiese el comportamiento perfecto. Pero, aquí la Señora Romero, solo viene a defender los intereses de los empresarios, aunque por ello, su dignidad como persona se vaya a la mismisima mierda. ¡ojo! Y ese precio, lo pone ella misma!

Lo que no nos podemos permitir, y en esto si estoy de acuerdo contigo Pepe, es que Málaga, despues del importante cartel que tuvo el Domingo de Resurrección, haya sido el hazmereir de toda España. Eso no se puede consentir. A eso no tenemos derecho, y en ese camino es en el que tenemos que trabajar.
Un abrazo.
José Daniel Rojo

Pacopi dijo...

Una pregunta: ¿participa en la caza del gato don Ildefonso, o se limita a aprobarlos en el reconocimiento?
Un saludo

Unknown dijo...

Querido Dani, si lees bien lo de rayar la perfección lo digo exclusivamente para su quehacer en el palco. En los corrales, todo lo contrario, tal como dices.
Saludos

El Coronel dijo...

Si yo soy presidente y por mi coj...digo que se lidien 6 toros, no devuelvo ni uno, pues quedaria mi criterio y mis coj...por los suelos, de ahi que nunca sea el Presidente el que imponga su mando y sean los veterinarios, los que asuman toda la responsabilidad.
Salud