Madurez, verdura y algún detallito

Si bien Curro Díaz ha dejado retazos de gusto y clase en la Maestranza, la oreja regalada por doña Anabel ha dejado el nivel de exigencia de la Maestranza bajo mínimos. Abellán aunque con ligera mejoría de su basta tauromaquia y, a pesar de los cantos fenicios a su madurez, ha vuelto a demostrar que es un pésimo torero. Su primer toro merecía haberse arrastrado desorejado. Girón, aunque apuntó detalles, está muy verde. En ferias importantes debe irse con mayor bagaje, aunque en Sevilla y con la crisis por montera, estos toreros baratos son del interés de la empresa. Seguro que don Puche lo trae a Málaga. En cuanto al ganado hubo de todo y fue en conjunto una corrida interesante para el aficionado. Foto: Arjona

MADUREZ, VERDURA Y ALGÚN DETALLITO

Por Pacopi

18 de Abril del 2009

PLAZA DE TOROS DE LA MAESTRANZA

Seis toros de José Luis Pereda-La Dehesilla.

Manso de carreta el 1º; el mejor de la tarde el 2º; mansurrón  toreable el 3º;lo mismo para el 4º, 5º más chico y 6º.

Curro Díaz: Silencio. Oreja (regalo de la presidenta)

Miguel Abellán: Vuelta. Saludos desde el Tercio

Cesar Girón: Saludos desde el Tercio. Silencio.

Resulta que ahora al Fenicio y compañía les ha dado por decir que Abellán es la madurez, cuando en realidad es un chulo fracasado que lleva más años en el toro que Matusalén y que ya no va a hacer nada en esto. Hoy lo ha demostrado con el mejor toro de la tarde, el segundo, un toro que se le fue crudo y que el único mérito que hizo para dar la vuelta al ruedo fue un muletazo invertido. Se dejó un pitón izquierdo para consagrar a un viejo como él, pero como no le adelantaba la muleta quedaba todo muy deslucido. Estocada trasera y dos descabellos. Vuelta.

El quinto fue muy mal lidiado y su matador hizo lo que decía Belmonte: se torea como se es. Estuvo basto cual braga de arpillera. El toro lo toreó a él, y recorrió en profana procesión toda la plaza. Se puso pesadísimo. Estocada desprendida. Saludos desde el tercio.

Actuó en primer lugar Curro Díaz, que nada pudo hacer con el manso primero. En el 4º tuvo algún detallito bueno y empleó el pico sin mesura ni comedimiento. Se llevó una voltereta con mala caída. Tal vez ello fuera la causa del regalo orejil que obtuvo tras  una estocada caída y petición de cuatro pañuelos.

Cerraba la terna Cesar Girón, nieto de torero, que está verde como lechuga y al que se le fue el tercero de tarde por su manifiesta ignorancia.  Ahogó al toro y dejó que le enganchara los engaños porque no tiene temple. Pinchazo y estocada tendida. Saludos desde el tercio.

 En el que cerraba plaza más de lo mismo. Enganchones que ocasionan que el toro termine con la cabeza como una devanadera. No sabe lo que hacer y termina con mantazos que le son reprochados por el público. Pinchazo, pinchazo hondo y tres descabellos. Silencio.

Al parecer este ilustre torpe, es de esos toreros que pertenecen a las órdenes mendicantes y que van por ahí pidiendo torear por haber nacido en tal ciudad. No dan un mal pase y se quejan de que torean poco y no lo hacen porque son unos tuerce botas. Les podría poner más de un ejemplo de gentes así de Málaga.

Un saludo.

El rincón de Malagueto

CORRIDA PARA AFICIONADOS

Puede que los exigentes se hayan visto frustrados porque los toros a simple vista han parecido malos. Ha sido espectáculo de muchos matices. Se han dado casi todos los posibles en cuanto a comportamientos de los astados. Manso, manso pregonao, distraído, encastado, etc.

Curro Díaz no ha podido redondear una faena importante por culpa del toro que se agotó muy pronto. De todas formas, abusó de los detallitos. Aunque ha toreado con mucho gusto lo poco que se le ha visto. Torero que debería tenerse más en cuenta, es de los más clásicos de hoy día.

Abellán nos ha sorprendido con un toreo maduro y con algunos detalles de arte. Parece que quiere remontar unos años insulsos en los que ha ido de chuleta y matón. Eso hay que hacerlo en el ruedo con un cinqueño. 

César Girón ha tenido su gran oportunidad en el tercero y pienso que ahogó al toro. Lástima que bajando tanto la mano y llevándolo largo, la faena no nos haya llenado. Quizás esté muy verde aún, aunque tiene tiempo por delante para sacar lo que lleva dentro.