Numerito pueblerino ante un público verbenero (Foto de Juan Pelegrín)OREJAS A GOGÓ
Por Malagueto
Madrid, 17 Mayo 2008
Toros para rejones de San Pelayo. Mansos, huidizos, desrazados y nobles. Se salvan quinto y sexto, pero por ser sólo menos malos que los cuatro primeros. Joao Moura; silencio en los dos. Hermoso de Mendoza; silencio y oreja y Andy Cartagena, leve petición y dos orejas.
Joao Moura, con dos marmolillos, ha hecho lo que ha podido y la edad le permite. Ha intentado templar como es costumbre en él y no ha podido. Los toros eran casi imposibles. El hombre ha arriesgado y se la ha jugado con algunos encontronazos obligando a su magnífico caballo "Castelo", que ha terminado con los bajos llenos de sangre a causa de las espuelas. Mató mal.
Hermoso de Mendoza ha estado algo decaído toda la tarde. No era para menos, con esos toros tan aburridos, poco se puede hacer. En su primero, que se le adelantaba y ponía en sobre aviso a sus caballos, ha estado correcto y poco más. Ha sacado nuevos caballos que ya veremos lo que hacen. Con estos toros, poco se les ha podido ver. Con su primero, lo intentó y nada potable. En su segundo le pone dos buenos rejones y saca a su estrella "Chenel" y el toro dice que embista su prima. No puede hacer nada ya que el Murube se dedica a irse a las tablas. Como final, con "Nativo", calienta el ambiente y mata de un rejón caído. Le gente ávida de aplaudir y de trofeos, pide la oreja que es totalmente injusta para una plaza como Madrid.
Andy Cartagena es la antítesis de sus compañeros. Es la locura y el circo a caballo. Antes, estas exhibiciones se hacían en plazas de segunda y tercera. Ahora hasta se permiten y premian en Madrid.
Ya este chico no se conforma con poner a su caballo con las manos en el estribo, ahora llega más arriba y el caballo, (yegua en este caso), pone las manos en lo alto de la barrera. Sin comentarios.Como su toro se presta poco al lucimiento, él se luce a su manera haciendo numeritos. Para calentar el ambiente, saca a Fandi, caballo de categoría en otras manos, hace sus cositas y la gente se quema las manos aplaudiendo. Mata de horrible bajonazo con hemorragia y algunos piden la oreja que no se le concede. En su segundo, algo más entonado en las embestidas, pone buenos pares que resultan poco apetecibles para el inculto público. Saca a "Pericalvo", una joya de caballo y haciendo cambios de manos, passage y otros numeritos, calienta al respetable. Mata de rejón caído y fulminante y el delirio. Dos orejas que ofenden a cualquier buen aficionado.
Galería fotográfica de Juan Pelegrín (las-ventas.com)
Galería fotográfica de Paloma Aguilar (burladero.com)
Apuntes del maestro César Palacios
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