sábado, 26 de agosto de 2017

Más flojos que un muelle de guita (Crónica 7ª Bilbao)

Polémica "banderillas políticas" al margen, el subalterno Iván García protagonizó un excelente tercio, aunque Cayetano pretendiera restarle protagonismo. 

BILBAO 25 de Agosto de 2017
Siete toros de Victoriano del Rio, uno como sobrero.
Casi lleno.
ENRIQUE PONCE.- Silencio. Dos orejas.
CAYETANO.- Al tercio. Silencio.
GINÉS MARÍN.- Aviso, al tercio. Oreja fácil.


MAS FLOJOS QUE UN MUELLE DE GUITA.
Por Francisco Picornell

Hoy llegaba el llamado maestro Ponce y, claro, ha bajado la presentación del ganado. Todos, los siete han perdido las manos y algunos las patas en algún momento de la lidia.
En el primero, que, como dicho queda en líneas precedentes, perdió las manos. Con la muleta dio medios pases con la muleta a media altura. La familia del toro, de haber sobrevivido, podría solicitar los beneficios monetarios de la Ley de dependencia. Pases de enfermero. No pasa el toro y el llamado maestro Ponce nos vende la burra. Se oye algún pito porque se pone pesado. Media tendida, descabello. Silencio.
Perdió las manos de salida en cuarto, luego, antes de llevarlo al caballo la invalidez, le afecta a los cuartos traseros. Algunas protestas. Comienza con la derecha dando pases de uno en uno, el toro lo atosiga entre pase y pase. Que mas les voy a contar que ustedes no sepan. Les hablaría del empleo del pico de la muleta, que vendió la burra con el cuento de dejar reponer al toro, que la faena fue larga cual día sin pitanza, pero ¡¡no le dieron aviso alguno!. El toro estaba agotado. Estocada, dos orejas, pero…¡no hubo indulto!!.

También perdió las manos el  segundo que le correspondía a Cayetano, a la hora de banderillear, tuvo un feo gesto, que fue obligar a uno de sus subalternos a poner un par con los colores de la bandera española. Y digo que el gesto era feo, no porque esté en desacuerdo con los colores de los palos, que lo estoy, sino por el acto de prepotencia que implica el obligar a un subalterno a poner el par de marras. Si usted quiere hacer un gesto de patriotismo o patrioterismo  poniendo un par con los colores de la bandera española o de la China popular y desafiar a los que le pitan, los pone usted, pero no tiene porque implicar a un empleado suyo. Claro el color de los palos originó pitos, por un lado y aplausos por otro. Una vez pasado el incidente,  dio mantazos de rodillas, previamente se quitó las zapatillas, luego se desabrochó el chaleco, con la izquierda instrumentó los pases de uno en uno, trapazos varios. Pinchazo, estocada echándose fuera, tengo en mente grabada la imagen del canal toros, tomando la escena por la espalda y se ve como Cayetano da un pase al lado para no pasar por los pitones. Me recordó la foto que Dani colgó el otro día diciendo que el Juli mataba al violín. Saludos desde el tercio.
No pudo con el quinto, al que le dio mantazos, por aquí y por allí  Pinchazo, sin cruzar, medía sin cruzar tendida. Silencio. Fue despedido con pitos al abandonar la plaza.

El tercero de la tarde se partió un pitón al rematar en un burladero. Salió el que era de sexto al que GINÉS MARÍN, que perdió las manos. Con la izquierda da pases que no dicen nada. Con la izquierda no cruza y da pases citando al hilo del pitón, luego algún pase fuera de sitio. Sacó un natural en el momento en que se cruza, perfilero. Tres pinchazos Aviso, dos descabellos.
En el sexto, que realmente era el sobrero de la misma ganadería y que se llamaba igual que el tercero, no se tenía en pie con cada pase perdía las manos. Medios pases. Es lamentable que un señor que se llama matador de toros, se empeñe de forma recalcitrante en darle pases a semejante inválido. Termina con el llamado arrimón. Estocada trasera, atravesada, volviendo la cara. Oreja de plaza de pueblo, casi casi de Málaga.


Hoy dicen, que acudió mas gente que otros días. Mañana repite el llamado maestro Ponce. En el callejón estaba el poeta del rebalaje tal vez tomando apuntes.

2 comentarios:

malagueto dijo...

Con el reloj en la mano D. Picornell, Ponce ayer en el cuarto toro, se merecía dos avisos. Solo cojo el reloj en las faenas de Ponce en Bilbao. Tengo una anécdota de los avisos, el presidente de Bilbao y la adoración de los Bilbaínos por Ponce.
Hace unos años, Ponce no puede matar a su toro y suenan dos avisos y el tercero no llega y habían pasado suficientes minutos. La gente de Bilbao, lo mismo adora a Ponce que lo acribilla a pitos.
Al día siguiente, le digo al presidente Matías González, hombre bastante próximo y nada endiosado, que su reloj atrasa mucho cuando Ponce torea...Me dice con una sonrisa socarrona; hombre no es para tanto, quizás me pasé en un minutillo, pero le devuelvo un toro a Ponce y me tengo que ir de España.....

Anónimo dijo...

Los ancianos siempre ilustrando a los mas jóvenes. Cuando lo veo por al tele no pongo el reloj, pero es muy ilustrativo la anécdota que cuentas de Matias. Lo mismo debe pasar con la crítica, a ver quien es capaz de decir que Ponce es un cuentista y un sacatrucos en vez de un "catedrático". Se mueven a base de tópicos. Ala, a cuidar al short body.
Picornell