jueves, 4 de junio de 2009

Chapuza intolerable en los premios de Córdoba

José Luis Moreno

Chapuza intolerable en los premios de Córdoba

Carlos Crivell en Sevillatoro.com

José Tomás se ha llevado los principales premios de la Feria de Córdoba. Los jurados se han pronunciado y así lo han determinado. Como he presenciado la Feria íntegra, puedo proclamar que el resultado de las votaciones de estos premios constituyen una chapuza vergonzosa que descalifica a los miembros de estos jurados y suponen una injusticia flagrante para quien ha sido el verdadero triunfador de este ciclo con cuatro orejas, cuatro toros y mucha calidad: José Luis Moreno.

Debe ser terrible para Moreno torear cuatro toros bien, dos de ellos del Marqués de Domecq en la corrida telonera con Rafaelillo, Bautista y un cuarto de plaza, cortar cuatro orejas y que lo premien con el de la mejor estocada, como para darle algo en forma de consolación. El jurado de El Corte Inglés debe dimitir de inmediato, porque aunque se supone que ha prevalecido el voto democrático, es evidente que estar en ese jurado es una ignominia por lo que es capaz de votar y por su capacidad para ser injusto.

Darle un premio a José Tomás es muy llamativo. Luce más que dárselo a un torero que el año pasado hizo doce paseíllos. No es lo mismo que los reciba Moreno, que sólo es un buen torero de segunda línea, machacado en Córdoba para ensalzar a Finito, arrinconado por los cursis de Córdoba, que son de Finito, y que nunca le han dado sitio a uno de Dos Torres. Son los mismos cordobeses que algún día dirán que Finito es Califa, un torero que ha despilfarrado su calidad en una mandanga sin remedio y que se permitió el lujo de despreciar dos orejas en su segunda tarde en la Feria. Un desprecio que es tal por mucho que ahora firme cartas de desagravio y conceda entrevistas para lavar su imagen maltrecha. Fue un desprecio en toda regla y es intolerable.

Lo más grave es lo del Premio Manolete, sobre todo porque al comprobar los nombres del jurado uno se pregunta dónde están los buenos críticos taurinos de Córdoba. Parece que un concejal nombra los miembros de forma caprichosa. Se lo han dado a Tomás, algo muy bonito, y le dan una patada a un torero que ha estado cumbre como Moreno.

Si lo del Manolete es grave, lo de los trofeos Coso de los Tejares es extraño, porque ahí hay nombres de personas que saben de toros. No han tenido ni la habilidad de darle a Tomás uno, el de Triunfador o Mejor faena, y el otro a Moreno. No quiero cenar, ahí tengo amigos que creo deben hacer una nota para explicar que ellos no tienen la culpa de este atropello.

A Moreno no lo quieren en su tierra. No le ha valido estar hecho un torero de cuerpo entero con los del Marqués, con toro bueno y con el menos bueno, capaz de torear con el capote con elegancia clásica, estando por encima de sus oponentes y que en la corrida de Las Ramblas le hizo frente al propio Tomás, le hizo un quite por gaoneras de lujo y se llevó tres orejas al mismo nivel que el de Galapagar.

Nadie duda que si quien corta las cuatro orejas es Finito, seguro que se lleva todos los trofeos. Pero eso de dárselo a un modesto, que encima le mojó la oreja al aspirante a Califa en la corrida del día 26, es algo que no pueden entender en la ciudad califal.

Estos comportamientos pueden explicar algo de lo que pasa en Córdoba. Hay un total anquilosamiento en materia taurina. Están anclados en el pasado. Siguen creyendo que tienen a la máxima figura, el nacido en Sabadell, y no se resignan a comprender que el tiempo de Finito ha pasado y no se espera, que es lo malo. Con estos planteamientos, se puede entrever que en Córdoba hay poca afición. ¿Qué puede exigir Moreno a los empresarios si los jurados lo minusvaloran de forma absurda? ¿Cómo se enterarán en Córdoba que tiene un enorme torero si ni lo premian después de cortar cuatro orejas?

Como quiera que José Tomás es un hombre justo, aficionado a devolver los premios que han ganado anteriormente personajes de escasa valía, que no quiere quitarle su mérito a quien se lo ha ganado en el ruedo, debería saber el torero de Galapagar lo ocurrido para que renunciara a estos trofeos ganados contra quien le ha superado en el ruedo, que es más humilde, tiene menos glamour y menos prensa, pero que es un pedazo de torero y se llama Moreno. La renuncia de Tomás al Manolete y a los de Coso de los Tejares sería un detalle digno de un señor. Alguien debe decirle que en Córdoba le han utilizado para humillar a un torero.

1 comentario:

Civilón dijo...

Hombre es que es mucho mas importante y "vende" mucho mas una foto dando el premio y cenando con "el mesias" que con un torero modesto que se lo ha ganado sobradamente y por meritos propios.
Que verguenza¡¡¡¡¡